Cómo detectar el cáncer de colon

El cáncer de colon, también conocido como cáncer colorrectal es el originado en el colon o recto. Pueden verse como dos tipos de cáncer separados, pero la medicina los agrupa debido a la cantidad de características comunes que comparten. Este es el tercer tipo de cáncer diagnosticado con mayor frecuencia, ocupando el mismo lugar en la tasa de mortalidad por cáncer en Estados Unidos y Europa. Por eso, hoy hablaremos sobre cómo es la deteccion precoz de cancer colon y cómo podemos llevarla a cabo.

Es importante destacar que este tipo de cáncer comienza con un crecimiento conocido como pólipos que ocurre en el revestimiento interno del tejido del colon o recto. Algunos tipos de pólipos pueden evolucionar en cáncer con el paso de los años, más no todos. Los dos tipos principales son los Adenomatosos, denominados precancerosos por la frecuencia con que mutan en afecciones cancerígenas, y los Inflamatorios, que no son considerados precancerosos.

Teniendo en cuenta el hecho de que los pólipos pueden tardar entre 10 y 15 años en convertirse en tejido canceroso, los médicos recomiendan las revisiones periódicas para detección del cáncer colorrectal. Hacerse estas pruebas de manera rutinaria, abren la posibilidad de detectar el cáncer en sus etapas iniciales, cuando sus dimensiones son menores, no se ha propagado y su tratamiento es menos complicado.

Estas pruebas han permitido la disminución en la tasa de mortalidad por cáncer colorrectal en las últimas décadas por los motivos antes mencionados.

Para prevenir este o cualquier otro tipo de cáncer, es recomendable acudir regularmente al médico y solicitar las pruebas a pesar de no existir ningún signo o síntoma de la existencia del mismo. La mayoría de los casos al tiempo que muestran signos visibles ya se encuentran en etapas avanzadas y que requieren un tratamiento más complejo que un extirpe como tal.

Algunas pruebas a las que puedes acudir como método preventivo son la Sigmoidoscopia Flexible, la Colonoscopia, el Enema de Bario de Doble Contraste, la Colonografía con CT, la Prueba Inmunoquímica Fecal, la Prueba de Sangre Oculta en o la prueba de ADN en las Heces Fecales.