Contratar un centro de día o un centro terapéutico

Cuando una persona es diagnosticada con Alzheimer lo normal es que caiga como un jarro de agua fría y tras un primer momento de incredulidad se empiece a estudiar qué hacer. La enfermedad obliga a cambios en la vida de la familia, pero también se hace necesario buscar terapia que ayude a frenar el avance de la enfermedad dentro de lo posible.

Algunas familias optan por llevar a sus enfermos a centros terapéuticos en los que diferentes profesionales pueden ayudarlos mediante estimulación cognitiva o ejercicios de fisioterapia. Pero estos centros funcionan de una manera similar a una clínica. El enfermo acude junto con un familiar o cuidador que se encarga de atenderlo y que una vez que acaba la terapia se lo lleva a casa.

Pero esto puede ser insuficiente en muchos casos, ya que la familia debe de atender a su trabajo o a hijos pequeños y no pueden acompañar al enfermo a la terapia o tenerlo bien atendido en casa durante todo el día. En estos casos, se hace necesario buscar un Centro dia centro Madrid para darle una atención más integral al enfermo.

En un centro de día no solo se le proporcionan terapias, también se le ofrece cuidado. Allí puede estar la persona durante las horas que sea necesario para la familia, recibiendo terapias, cuidados, alimentación, aseo y todo lo que pueda necesitar el tiempo que esté contratado.

La familia, mientras tanto, puede continuar con su vida y acudir a recoger al enfermo en el horario acordado, para que este pueda estar en su casa durante la noche. Estos centros funcionan además como local de actividades, ayudando a que los enfermos mantengan, dentro de sus posibilidades, una vida social satisfactoria.

Estos centros suelen trabajar en coordinación con el médico neurólogo que atiende al enfermo y que envía sus informes al centro para que allí tengan una idea clara del estado de la persona. En algunos casos, el neurólogo también puede solicitar un informe de estos profesionales para tener una opinión más clara sobre su evolución.

Incluso en algunos casos, los centros de día pueden ofrecer a la familia la posibilidad de que el enfermo sea tratado por un médico experto en neurología dentro del mismo centro para que todo esté más centralizado y coordinado. La labor de la familia es también importante, ya que tienen que colaborar con los profesionales en todo aquello que se les solicite.