LO MÁS CÓMODO DE PONER EN TU VENTANA

Los estores están más de moda que nunca, en casi todos los pisos de mis amigos a los que voy casi todos tienen estores en sus ventanas, ya que son muy fáciles de instalar y de limpiar, hay que recordar que las cortinas de toda la vida dan un latazo a la hora de lavarlas y no todo el mundo tiene una lavadora en la que le entren unas cortinas si son un poco grandes. Mis amigos han decidido comprarlos estores online, ya que así les salían más baratos y podían escoger los colores y los materiales que más les gustaban y que más les pegaban con la decoración de sus pisos.

 

Es cierto que hay que tener en cuenta que los estores son muy útiles ya que dejan pasar la cantidad de luz que tú mismo decidas y al mismo tiempo deja pasar el aire que en esta temporada de verano es algo que no se debe olvidar, hay que aprovechar cualquier ligera brisilla si es que la hay porque este año que está siendo el más caluroso de los últimos años, para comprar un ventilador es casi imposible, en cantidad de comercios de venta de electrodomésticos no les quedan existencias desde hace bastante tiempo.

 

El otro día me comentó un amigo en poner un ventilador de techo pero llegó a la conclusión de que los ventiladores no combinan bien con los estores ya que hacen ruido cuando se mueven y chocan contra la pared o la ventana, eso en mi caso no es un problema ya que no tengo ningún estor en mi ventana, sino que tengo una contraventana de madera que para dormir es ideal ya que no deja pasar nada de luz. Pero si al contrario a mí no tienes problemas para dormir con la claridad poner un estor en la ventana es la mejor solución y los puedes encontrar muy baratitos.

 

Al final que cada uno ponga en las ventanas de su casa lo que más le guste y mejor función haga, que en definitiva la funcionabilidad es lo que más valoramos en estos casos.

Esta casa es una ruina

Miro mi nueva casa y pienso en aquella película protagonizada por Tom Hanks y titulada ¡Esta casa es una ruina! Es una comedia de los 80 que me hizo bastante gracia en su día y envejeció bastante bien, al contrario que otros títulos de aquella década. En dicha película, la pareja protagonista es timada por unos vendedores y acaban comprando una gran casa de estilo colonial… que es una verdadera ruina. Pero se lo toman con serenidad y deciden rehabilitar la casa… durante mucho tiempo.

En ¡Esta casa es una ruina! el encargado de obra siempre les repite “2 semanas” a la pregunta de cuánto tiempo queda para terminar las obras. En nuestro caso, no tenemos encargado de obra. Somos nosotros mismos los que nos repetimos que quedan 2 semanas cuando echamos un vistazo a nuestro alrededor y comprobamos que todo está manga por hombro.

Uno de los problemas reside en que los otros pisos en los que habíamos estado antes tenían muebles. Y aquí nos ha tocado comprar casi todos los muebles. No teníamos ni colchones y somieres, por ejemplo. Dos de las tres habitaciones van a ser dormitorios, por lo que necesitamos dos cosas de casi todo. Además del gasto que supone, conlleva mucho tiempo.

Y es que se da la circunstancia de que no somos personas muy decididas. Nos gusta mirar y remirar hasta dar con la tecla, como se suele decir. Nunca compramos lo primero que vemos. En otras circunstancias esto tiene un innegable beneficio, pero cuando se trata de llenar una casa de muebles, la cosa se complica.

Por ejemplo, en el caso de los colchones y somieres ya hemos estado bastante tiempo. Para mí el colchón es un tema esencial. Sé lo que es dormir durante años en un colchón incómodo y no pienso repetir la experiencia. Pero hoy en día existen tanta variedades que uno sabe qué hacer. Y así con todo: de todo hay multitud de opciones.

Yo creo que es uno de los problemas de la actualidad a todos los niveles: hay demasiada oferta de todo, demasiados tipos de yogures… y demasiados tipos de colchones. Pero en fin, no nos queda otra opción que hacernos expertos en muebles y complementos de hogar si queremos que esta casa deje de ser una ruina…