Preparando el verano

El verano ya está aquí, el verano ya llegó, como decía la canción y todos nos estamos preparando a conciencia para que estas próximas semanas sean inolvidables. Porque los veranos pasados no los vamos a olvidar, pero por razones diferentes. Este año toca disfrutar y desquitarse… al menos un poco. Y aunque ahora toca guerra e inflación, esperemos que poco a poco todo eso también se pueda solucionar para el bien de todos.

Para nosotros, este verano será muy especial por los cambios que hemos hecho en el jardín de la casa del pueblo. Durante los dos últimos años en los que tuvimos que cambiar nuestras rutinas habituales aprovechamos para repensar un poco sobre la casa vieja y decidimos hacer algunas reformas importantes. Teniendo en cuenta que pasamos mucho más tiempo en ella pensamos que era el momento de adecentarla, empezando por el jardín, la zona más echada perder del conjunto y, por ello, la de más posibilidades.

¿Por qué no pasar más tiempo allí bajo una sombrilla grande jardín? Pensamos que no todo el mundo, ni mucho menos, tenía la suerte que teníamos nosotros de poder tener una casa con jardín abierto. Supongo que durante le época del confinamiento, otros en nuestro lugar llegarían a la misma conclusión: la importancia que tiene contar con una casa con jardín que permita estar en contacto con el aire libre. Porque parques, montes y senderos hay muchos, pero como en casa no se está en ningún sitio. 

Así es que además de la sombrilla grande jardin que compramos para los días más soleados, hicimos todo lo posible para que el jardín recuperara su antiguo aspecto, cuando nosotros éramos niños y corríamos por el jardín viviendo aventuras como si aquello fuera el Amazonas. Y nos costó, porque hoy en día cualquier cosa cuesta un dineral. Pero en este caso era por una buena causa. Porque este verano no vamos a ir a ningún sitio. Nos hemos acostumbrado a pasar el verano en la casa del pueblo, pero ahora con un jardín que hace honor a su nombre… no como antes.