La mejor heladería 

Año a año sigue al pie del cañón y año a año todos los veranos hay cola en la calle para disfrutar de sus helados. Solo tienen dos sucursales en dos pequeños pueblos marineros y siempre me he preguntado por qué no tratan de dar el salto y abrir una heladería en una gran ciudad, aunque sea dentro de la misma provincia. Pero ellos parecen estar bien así.

Seguro que a lo largo de estos años han oído muchos cantos de sirena, seguro que han tenido encuentros con emprendedores con experiencia en el sector que les ha ofrecido la posibilidad de ampliar el negocio a lo mejor introduciendo más capital a cambio de abrir más tiendas y seguro que dar un toque ‘moderno’ a alguna receta y a la decoración. 

Y seguro que también les han preguntado por el Proveedor de helados para hosteleria. Porque eso sí que es otro misterio. ¿Cómo se las arreglan para hacer este helado tan rico? Porque tú puedes llenar un helado de toppings y cosas raras, pero lo que cuenta al final es el sabor y la textura del helado de base. Y en eso no tienen competencia. Por supuesto, ellos son súper celosos de su receta, casi como el Señor Cangrejo de Fondo de Bikini. Deben tener la receta guardada en una caja fuerte con siete llaves.

Pero alguna vez que les ha hecho una entrevista no han querido darle mucho más misterio al asunto. Dicen que solo se trata de buenos ingredientes y de cuidado a la hora de mezclarlos. Por supuesto, la calidad de los ingredientes que proporciona el Proveedor de helados para hostelería es decisiva y alguna vez han dejado caer que otras heladerías prefieren ahorrar costes en los ingredientes y que tal vez por ello no logren dar con la tecla.

Y a la pregunta de si piensan algún día ampliar el negocio, ‘abrir en la capital’ y todas esas cosas siempre esbozan una sonrisa y dicen que no está en sus planes, que escuchan ofertas pero que no están dispuestas a cambiar ni un ápice de la receta ni del estilo tradicional de sus heladerías.