Viajar en avión con silla de ruedas

Existen dos tipos de viajeros que necesitan una silla de ruedas cuando van en avión: aquellos que tienen una incapacidad que les obliga a desplazarse así siempre y los que tienen incapacidad que hace que les resulte muy complicado moverse por el aeropuerto, pero que no usan la silla de ruedas el cien por cien del tiempo.

En ambos casos es posible viajar en avión con comodidad. Además, dejando el vehículo en un Parking low cost en barajas el desplazamiento hasta el aeropuerto será mucho más cómodo y no saldrá por un ojo de la cara.

Para viajar en silla de ruedas o con una persona con incapacidad que la necesita para su traslado en el aeropuerto es necesario contactar con la compañía con antelación. El número de plazas que están reservadas para este tipo de viajeros están limitadas por ley, ya que son personas que necesitan unas condiciones especiales.

Para aquellos que no pueden caminar en absoluto, existen aerolíneas que cuentan con plazas en las que es posible anclar la silla. Pero esto no es habitual ya que tienen que tener un tamaño de avión grande y unas condiciones especiales. Lo normal es que el personal de la aerolínea le pida al viajero que se cambie a una de las sillas con las que ellos trabajan, asistiéndole de ser necesario, y le pidan que facture la silla.

Una vez en cabina, el viajero es asistido nuevamente para que pueda ocupar un asiento. Normalmente, se le ofrecen aquellos que resultan más amplios y que le dan una mayor facilidad para poder acomodarse.

Las sillas de ruedas pueden facturarse igual que cualquier otro bulto. Pero las que tienen batería pueden necesitar que esta sea desmontada. Por este motivo, hay que explicar siempre a la compañía aérea con qué silla se quiere viajar. Algunas solicitan las instrucciones o el modelo para poder conocer las características y explicar qué tendrá que hacerse. La seguridad es fundamental.

Incluso es posible facturar un scooter de movilidad, pero también se debe de cumplir con una serie de requisitos y también es importante pactar todo previamente para no llegar al aeropuerto y tener que quedarse en tierra por motivos de seguridad.

La primera vez que se viaja con una silla puede ser motivo de nervios o de preocupaciones, pero para las compañías aéreas no será nunca algo nuevo y podrán guiar perfectamente todos los pasos necesarios.